Repsol alcanza un resultado neto de 1.112 millones de euros en el primer trimestre.
Repsol
Communiqué de presse
- Repsol obtuvo un resultado neto de 1.112 millones de euros en el primer trimestre de 2023, un periodo en el que la compañía acentuó su perfil multienergético con el lanzamiento de un innovador programa, único en España, que vincula todas las energías que ofrece a los clientes.
- La compañía avanzó guiada por su Plan Estratégico 2021-2025 y su modelo de negocio integrado, que fueron clave para obtener este resultado en un trimestre en el que los precios del crudo cayeron, de media, un 20% respecto al mismo periodo del año anterior.
- Repsol continúa ofreciendo descuentos en sus estaciones de servicio de España. Sumando el conjunto de 2022 y el primer trimestre de 2023, este esfuerzo ha supuesto ahorros adicionales para los clientes cercanos a 550 millones de euros.
- Gracias al lanzamiento de su nuevo programa de Energías Conectadas, Repsol ofrece, desde el 1 de abril, descuentos que van desde los 5 hasta los 20 céntimos de euro por litro de combustible en función del número de productos que se contraten: combustible, electricidad, calefacción, solar y movilidad eléctrica.
- Durante el periodo, Repsol invirtió 1.726 millones de euros, destinados principalmente a España y Estados Unidos. La compañía prevé que un 35% de las inversiones de 2023 se destinen a proyectos bajos en carbono.
- En enero se abonó un dividendo en efectivo de 0,35 euros brutos por acción, la misma cantidad propuesta a la Junta General para su distribución en julio. Con estos pagos, Repsol incrementará un 11% la remuneración en efectivo para sus accionistas en 2023, a lo que se añadirá una reducción de capital de 50 millones de acciones.
Josu Jon Imaz, Consejero Delegado de Repsol
- “Nuestro modelo de negocio integrado, así como el cumplimiento y la ambición de nuestro Plan Estratégico, están siendo fundamentales para obtener resultados sólidos. Al mismo tiempo, seguimos elevando nuestro perfil multienergético y avanzamos en la descarbonización. Hemos lanzado una oferta comercial pionera en España, que ayuda a nuestros clientes en su día a día al vincular todas las energías necesarias para la movilidad y el hogar, y afianza nuestra visión de compañía”.
Repsol alcanzó un resultado neto de 1.112 millones de euros en el primer trimestre de 2023. El modelo de negocio integrado y el Plan Estratégico 2021-2025 fueron clave para lograr este resultado en un contexto internacional cargado de incertidumbres y de volatilidad en los mercados. La compañía continúa avanzando en su transformación y reforzando su perfil multienenergético, especialmente tras el lanzamiento el 1 de abril de Energías Conectadas, una propuesta comercial pionera en España que permite ahorrar y disponer de un único proveedor que cubre todas sus necesidades de energía para la movilidad y el hogar.
Los precios de los hidrocarburos disminuyeron de forma notable entre enero y marzo, lastrados por las perspectivas económicas inciertas de Estados Unidos y Europa ante las dificultades para frenar la inflación global. El crudo Brent rebajó su cotización media hasta los 81 dólares por barril, un 21% menos que en el primer trimestre de 2022, con una caída notable en marzo, hasta los 72 dólares por barril, derivada de la crisis bancaria vivida a mediados de mes. Por su parte, el gas Henry Hub se pagó a una media de 3,4 dólares por MBtu, un 32% inferior a la de los mismos meses de 2022.
En este contexto, todas las áreas de negocio de la compañía lograron resultados positivos. En los casos de Cliente, Industrial y Generación baja en carbono estuvieron por encima de los obtenidos en el mismo periodo del ejercicio anterior. Por su parte, Exploración y Producción reflejó en su cifra el mencionado descenso considerable de los precios de los hidrocarburos. El modelo integrado de Repsol jugó un papel indispensable para que, con todo ello, el resultado ajustado, que mide específicamente el funcionamiento de los negocios, sumase 1.891 millones de euros.
El entorno internacional continuó estando influido por la invasión de Ucrania y las consecuentes sanciones impuestas a los productos rusos. Para poder contribuir a paliar sus consecuencias, Repsol, en línea con su responsabilidad como servicio esencial para la sociedad, prolongó durante todo el trimestre los descuentos en sus estaciones de servicio. Esta medida fue anunciada de forma pionera en los últimos días del año 2022, después de que el Gobierno de España anunciase que no prorrogaba la bonificación estatal sobre el precio de los carburantes. Sumando el conjunto de 2022 y los tres primeros meses de 2023, Repsol ha ofrecido ahorros adicionales para sus clientes cercanos a 550 millones de euros.
Oferta multienergía pionera en España
El pasado 1 de abril, Repsol puso en marcha un innovador programa que eleva el perfil multienergético de la oferta a sus clientes. Les permite contar con una propuesta de valor única, con ventajas competitivas derivadas de contar con un único proveedor que puede satisfacer todas sus necesidades energéticas (combustible, electricidad, calefacción, solar o movilidad eléctrica). Una vez desplegada, sustituyó a los descuentos que hasta entonces entregaba la compañía y los vinculó a que los clientes contraten sus productos energéticos y los abonen a través de Waylet, su aplicación gratuita de pago y fidelización.
Gracias a este nuevo programa de Energías Conectadas, al que ya se han adherido cinco millones de clientes, se puede alcanzar un descuento en forma de saldo Waylet que va desde los 5 hasta los 20 céntimos de euro por litro de combustible y un 100% del importe en las recargas de vehículos eléctricos.
Los ahorros generados pueden utilizarse para el pago en estaciones de servicio y puntos de recarga eléctrica, en las facturas de Repsol (luz y gas), en la compra de bombonas de butano, pedidos de gasóleo, tarjetas de regalo y en cualquiera de los más de 4.400 establecimientos adheridos a la red Waylet.
Transformación de los negocios
El lanzamiento de su nueva oferta para los clientes está alineado con la visión del sector energético de la compañía, que apuesta por integrar todas las fuentes que contribuyan a lograr una transición energética justa y eficiente, con el menor coste posible para los ciudadanos.
Siguiendo este objetivo, entre enero y marzo de 2023, Repsol avanzó en su transformación y en su descarbonización, desarrollando proyectos en estos ámbitos a los que destinó gran parte de los 1.726 millones de euros de inversión empleados en el trimestre. El mayor porcentaje de esta cantidad se empleó en España y Estados Unidos, dos países clave en su estrategia. La compañía prevé que un 35% de las inversiones de 2023 se destinen a proyectos bajos en carbono, lo que refuerza su carácter transformador y está alineado con el Plan Estratégico 2021-2025.
La apuesta por la sostenibilidad futura de la industria y la transformación de los grandes centros industriales de Repsol, seis de ellos en la Península Ibérica, continúa siendo uno de los focos principales de actuación. En este sentido, cabe destacar el inicio a finales de marzo de la construcción del proyecto de ampliación del Complejo Industrial de Sines (Portugal), que contará con nuevas plantas donde se fabricarán productos 100% reciclables y con aplicaciones altamente especializadas, para sectores como el farmacéutico, el automovilístico o el alimentario.
Esta iniciativa se suma al desarrollo en Cartagena de la primera planta de biocombustibles avanzados de España, cuyas obras han avanzado durante el trimestre con la previsión de su puesta en marcha a finales del año; o los electrolizadores vinculados a las instalaciones de Bilbao o Tarragona. Asimismo, Repsol está incrementando progresivamente su producción de biocombustibles, lo que ha contribuido positiva-mente al resultado del negocio industrial.
La estrategia de transformación de Repsol para alcanzar cero emisiones netas ha sido respaldada recientemente por el ICO, que el pasado 19 de abril firmó con la compañía la concesión de un préstamo de 300 millones de euros. Esta financiación, ligada a criterios de sostenibilidad, se centra en la evolución de las instalaciones industriales de Repsol a polos multienergéticos, capaces de generar productos con baja, nula e incluso negativa huella de carbono, basada en la innovación, la economía circular y en su apuesta por liderar la producción de combustibles renovables e hidrógeno renovable.
Esta aportación, que reafirma el camino de descarbonización seguido por Repsol, se suma a la acordada en 2022 con el Banco Europeo de Inversiones (BEI), que concedió un préstamo de 120 millones de euros para apoyar la construcción y explotación de la planta de biocombustibles avanzados de Cartagena. Ecoplanta, otro proyecto en el que participa Repsol y que se desarrollará en Tarragona con tecnología puntera, también firmó el año pasado un acuerdo de financiación con la Comisión Europea en el marco de su Fondo de Innovación. Esta iniciativa supondrá la construcción de la primera planta de España de transformación de residuos sólidos urbanos no reciclables en metanol circular, que se usaría para fabricar nuevos materiales y biocombustibles avanzados.
El esfuerzo inversor de Repsol para asegurar el futuro de sus centros industriales está permitiendo que pueda dar una mejor respuesta al actual escenario de sanciones a los productos rusos, dado que, entre otras cuestiones, la compañía cuenta con gran capacidad para obtener mayor valor del procesamiento de crudos pesados. Contar con instalaciones industriales de vanguardia refuerza la independencia energética, origina una importante actividad económica y es pieza indispensable para la generación de empleo (200.000 familias dependen directamente del sector del refino en España). Todo ello toma mayor relevancia en el actual escenario europeo, donde se han cerrado 24 refinerías en los últimos 15 años. Esta situación contrasta con la tendencia en Estados Unidos o en la región del Golfo Pérsico, que prevén ampliar en los próximos años sus respectivas capacidades de refino en un millón de barriles diarios.
Retribución creciente para los accionistas
Repsol mantuvo en el primer trimestre de 2023 una sólida generación de caja, que le permitió hacer frente con solvencia a la volatilidad del entorno, aprovechar oportunidades de crecimiento rentable y adelantar los objetivos de retribución a los accionistas. Adicionalmente, la compañía redujo su deuda neta, hasta situarla en 880 millones de euros al final del periodo.
En lo que se refiere a la remuneración para los más de 520.000 accionistas de Repsol, la mayoría de ellos minoritarios y localizados en España, la compañía abonó el pasado enero un dividendo en efectivo de 0,35 euros brutos por acción. Esta misma cantidad se distribuirá en julio tras su aprobación por parte de la Junta General, cuya celebración está prevista para el próximo 25 de mayo. Con estos pagos, en 2023 se incrementará un 11% la remuneración a los accionistas, hasta los 0,70 euros brutos por acción, con lo que se adelanta el objetivo previsto por el Plan Estratégico para el año 2024.
A este dividendo en efectivo se añadirá, antes del final de julio, una nueva reducción de capital de 50 millones de acciones propuesta por el Consejo a la próxima Junta General, tras haberse reducido el capital en 200 millones de acciones en el ejercicio 2022, cantidad prevista para todo el periodo 2021-2025. Para cumplir con esta nueva meta, el 6 de marzo comenzó un nuevo programa de recompra para adquirir un máximo de 35 millones de acciones.
Hitos del primer trimestre de 2023
- En marzo, Repsol cerró la incorporación de EIG como socio estratégico de su negocio de Exploración y Producción, en una operación que valora esta área en, aproximadamente, 19.000 millones de dólares. El inversor estadounidense adquirió un 25% del Upstream de Repsol, que seguirá centrado en focalizar y descarbonizar su cartera de activos.
- Durante el trimestre, Repsol finalizó la adquisición de la plataforma de energías renovables Asterion Energies, que gestiona una cartera de 7.700 MW, 2.500 de ellos en avanzado estado de desarrollo. Los activos se encuentran, principalmente, en España e Italia.
- El 28 de febrero, Repsol anunció un acuerdo con el promotor y desarrollador ABO Wind para incorporar 250 MW a su cartera de activos renovables en España a través de la compra de tres proyectos eólicos y dos solares. Todos los activos adquiridos por Repsol en esta transacción se encuentran en fase avanzada de desarrollo, disponen ya de Declaración de Impacto Ambiental (DIA) positiva y está previsto que entren en funcionamiento entre 2024 y 2025.
- El primer proyecto renovable de Repsol en Castilla y León comenzó a producir electricidad en febrero. El proyecto eólico, denominado Pi, se ubica en las provincias de Palencia y Valladolid y está formado por siete parques que suman una capacidad total instalada de 175 MW. Una vez que todos ellos entren en operación comercial, producirán 596 GWh de energía renovable al año, el equivalente al consumo anual medio de 170.900 hogares. Además, el desarrollo de Delta II, instalación formada por 26 parques eólicos situados en Aragón, ha avanzado notablemente. Cuatro de estos parques han finalizado sus obras en menos de 11 meses y ya están operativos, con una potencia total de 160 MW.
- Ya en abril, Repsol puso en marcha un proyecto de recogida de aceite de cocina usado, que será utilizado como materia prima para producir combustibles renovables cero emisiones netas de CO2. La iniciativa arrancó con 134 puntos de recogida de aceite instalados en estaciones de servicio de la Comunidad de Madrid, que colabora en el proyecto.
- El 3 de marzo, la compañía inauguró su nuevo terminal marítimo en el Puerto Exterior de A Coruña. Las nuevas instalaciones en Punta Langosteira, además de permitir el traslado del terminal marítimo interior, serán claves en la transformación industrial del complejo, facilitando la logística de nuevos productos y materias primas y contribuyendo así a la iniciativa de la Autoridad Portuaria A Coruña Green Port, para la creación de un polo de energías renovables.
- En enero, Repsol firmó un acuerdo con ASAJA para buscar soluciones que mejoren la gestión de subproductos de la agricultura y la ganadería en entornos rurales y poco poblados. Repsol analizará el potencial de estos residuos y subproductos para incorporarlos a la fabricación de combustibles renovables y materiales circulares en sus complejos industriales, impulsando así la economía circular y generando nuevas oportunidades en el sector primario.
- La compañía anunció en febrero una nueva inversión de 26 millones de euros en su Complejo Industrial de Puertollano para incrementar la capacidad de fabricación de materiales circulares hasta las 25.000 toneladas anuales, con una nueva línea de producción que se pondrá en marcha en 2024. Se trata de una nueva apuesta por la economía circular para promover la valorización de residuos y el uso de plásticos 100% circulares.
- La compañía alcanzó durante el trimestre diversos acuerdos para avanzar en movilidad sostenible. En febrero, estableció con Bolt un acuerdo que facilitará la transición energética de las pequeñas flotas y autónomos de VTC y taxi que operan con esta empresa, gracias a un servicio integral de recarga con la garantía de que el origen de la electricidad es 100% renovable. A mediados de marzo, Repsol se convirtió en socio estratégico de SEUR para el proceso de transición energética y descarbonización de su flota. Una vez finalizado el trimestre, en abril, la compañía alcanzó un acuerdo con Freenow para impulsar la movilidad eléctrica en el sector del taxi y otro con la compañía aérea Gestair, para desarro-llar proyectos de combustibles sostenibles para la aviación. Por otro lado, Wible, empresa de carsharing participada por Repsol, amplió en marzo su flota con 150 nuevos vehículos híbridos enchufables con los que suma un total de 650 coches compartidos.