Nuevo etiquetado Europeo para carburantes y vehículos.
El próximo 12 de octubre entra en vigor el nuevo etiquetado europeo para carburantes y vehículos. Tras un cambio derivado por la legislación europea, que tiene como objetivo de fomentar el abandono de los combustibles fósiles por otros menos contaminantes conocidos como “alternativos”, tanto las estaciones de servicio como los vehículos deberán aplicar la nueva denominación de combustibles para que sean aplicables a los consumidores de los 28 países de la Unión Europea, de los países del EEE (Islandia, Liechtenstein y Noruega) y de Macedonia, Serbia, Suiza y Turquía.
La nueva directiva de la Unión Europea ha querido unificar los distintos tipos de combustible y desarrollar un único conjunto de etiquetas de combustible. Por lo tanto, a partir de esta fecha, el nuevo etiquetado deberá estar presente tanto en los manuales y en la tapa del depósito de combustible de los nuevos vehículos como en los aparatos surtidores y en los concesionarios de vehículos.
Los indicativos tradicionales no van a desaparecer de ninguna manera, por lo que continuaremos viendo los carteles de Gasolina 95, Gasolina 98 o Diésel. El nuevo etiquetado se trata únicamente de un complemento adicional para que el conductor sepa de antemano qué tipo de combustible acepta su vehículo.
En caso de que tengas un coche de gasolina, el símbolo que te compete es el círculo. Dentro de este círculo aparecerá la palabra E (en referencia al Etanol) junto un número. En caso de que en tu vehículo aparezca el número 5, la etiqueta te advierte que el vehículo puede utilizar gasolina que contenga hasta un 5% de etanol. En tu etiqueta también podrás encontrarte con la nomenclatura E10 (para aquellos vehículos que puedan utilizar gasolina con hasta un 10% de etanol) y E85.
Si tienes un vehículo diésel, los símbolos en los que te tendrás que fijar son los cuadrados. En este caso, dentro del cuadrado aparecerá la palabra B (en referencia a Biodiésel) junto a un número. En esta categoría encontraremos B7, B10 y XTL. Mientras que las dos primeras determinan el porcentaje de biodiésel en gasoil que acepta el vehículo, la tercera sirve para determinar que el coche acepta diésel parafínico.
Por último, para los combustibles gaseosos la Unión Europea ha escogido un rombo. Dentro de cada uno de estos rombos podrás encontrar siglas como H2 (en referencia al hidrógeno), CNG (Gas Natural Comprimido), LPG (Gas Licuado de Petróleo) y LNG (Gas Natural Licuado). Por lo tanto, si te decantas por combustibles alternativos, deberás tener en cuenta estos símbolos antes de repostar.
Alberto Diez Gutiérrez
Departamento Impuestos Especiales
AlcosAgemes S.L.